En las últimas décadas ha acontecido un fenómeno que nadie puede ignorar. Un avance enormemente arrasador y que está en todo su apogeo de las tecnologías informáticas. Cada vez más y más utilizamos el centro de control de esta tecnología, los ordenadores, para hacer toda nuestra vida cotidiana, consultar internet, hacer pública nuestra vida privada, hacer la compra, o incluso buscar a la persona especial que compartirá con nosotros toda nuestra vida.
Un ejemplo de ello son las redes sociales. Actualmente usamos las redes sociales como forma de relacionarnos y estar a la moda, pero ... ¿hasta que punto nos metemos en esta vida paralela, y hasta que punto vivimos en ella?
Hemos dejado de vivir, hemos dejado de disfrutar cada momento, pues es mucho más importante disfrutar sentado en tu escritorio del momento, viviendolo delante de una pantalla mientra consultamos nuestra red social y nuestros 423 amigos lo disfrutan enormemente con nosotros (si no están conectados... Rápido!! demosle un toque con el movil para que vengan corriendo). Antes, que se disfrutaba una tarde de campo con la familia, o se admiraba la forma en la que hacian unos cuantos amigos el payaso, pero hoy día eso no importa. Lo importante es inmortalizar el momento perfectamente con la cámara digital de 10 megapíxeles (para los más aventajados con el móvil) y así que todo el mundo vea lo feliz que soy, y poder presumir, cuanto más fotos, etiquetas, comentarios... mejor! más popular soy y más querido me siento. Por supuesto una sonrisa forzada siempre vendrá bien,... hay que ensayarla con esmero, pues debe aguantar al menos 15 segundos,... y si no no importa, siempre podremos repetirla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario